sábado, 11 de agosto de 2012

Al que juzgue mi camino, le presto mis zapatos

Al que juzgue mi camino, le presto mis zapatos; son pocos los amigos que logran entender lo que pasa en la vida de un paciente con lupus, pocos los que comprenden las decisiones que tomamos, el porque nos limitamos las salidas de fiesta, o de excursión, para nosotros es difícil, mantenernos al ritmo en que van los demás, somos mas lentas (os), nos pesan los huesos, nuestros padecimientos son internos mas que todo, por eso es fácil para muchos, decirnos que fingimos, que son excusas, que nos volvemos aburridos, esas palabras pueden ir y venir si son de extraños, ellos no nos conocen, pero cuando viene de alguien cercano, como un amig@, alguien a quien consideras importante en tu vida y por ende sus palabras y acciones tienen que ver mucho en nuestro estado de animo, en ese momento es cuando duele y duele mucho.

Si no entiendes, solo  preguntame sobre el LUPUS.


Cada quien tiene una  historia que contar, sus heridas, sus fracasos, sus éxitos y sus  metas y todos toman decisiones diferentes para conseguir lo que quieren, no voy a mentirles, aveces me dejo ganar por la depresión y me siento lenta y estúpida para seguir con mis proyectos, pero me levanto, no me quedo en el piso esperando que el resto me pase por encima, no niego que pasa muchas veces, pero no me importa, porque por más veces que me sienta decaída y derrotada, me sigo levantando y desmotiva que las personas que consideras cercanas, solo vean como caes y a partir de eso, te señalen. yo solo se que no hay anda imposible, y que aunque me demore en cumplir mis metas, se que las cumpliré aunque ante los ojos del mundo el lupus siga siendo invisible.

Desmotiva que el mundo no sepa del lupus, que sea una enfermedad invisible, que la padezcamos muchas y que muchas veces nos aguantemos los dolores, nos callemos las quejas o lloremos en silencio, por que el mundo simplemente nos ve sanas, no digo todo el mundo, pero si la gran parte, pero tengo la esperanza de que en algún momento sintamos la comprensión de aquellos que nos escuchan y entiendan las decisiones que tomamos, que entiendan que nuestro cuerpo tiene una energía limitada, muy por debajo de la mitad de la energía que pueden tener los demás. aveces solo necesitamos un "te entiendo" o un cambio de planes, algo mas relajado que hacer que nos llene de alegría y nos haga sentir mejor en este crudo caminar que nos toca cada día.

2 comentarios:

  1. Pienso lo mismo, porque muchas veces me he sentido igual... es muy difícil esos días que te duele todo el cuerpo y tus allegados te ven como si estuvieras exagerando... qué difícil... y comprender las formas de pensar de nuestros seres queridos ya que ellos les cuesta mucho entender nuestra forma de vivir o a veces prefieren negar la existencia de nuestra enfermedad como una forma de protegernos ... pero hay que seguir siempre adelante con la fortaleza que nos da Dios cada día!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es difícil explicar a alguien algo q ellos no sienten pero animo alejandra, no estamos solas, y siempre habrán prejuicios, debemos permanecer fuertes.

      Eliminar